Capítulo 166: Dios demoníaco superior contra el Poder de Hwanmong (1)

Dos brillantes ojos brillaban bajo el pelo rubio.

Vividos labios rojos.

Piel que recordaba la luz de la luna. Un paño blanco cubrió todas las partes importantes pero se mezcló perfectamente con su piel.

Ella no hizo nada, simplemente se quedó allí.

Sin embargo, hizo que Thanatos y Shilenda pareciesen sencillas.

Deslumbrante.

Sólo mirarla era suficiente para hacer que este sombrío mundo parezca fascinante.

Una diosa que personificaba el esplendor de la destrucción.

¡Una estrella brillante que iluminaba la oscuridad!

No era una exageración.

Kang-jun dejó de respirar tan pronto como la vio.

¡La primera clasificada la gran diosa demoníaca Cardia! Ella era literalmente mil de mil.

Hasta que la vio, Kang-jun pensaba que Karosio, Shilenda y Thanatos eran la culminación de la belleza. Por supuesto, Thanatos era de lejos la más bella de ellas y había estado seguro de que no habría nadie que pudiera superarla en el mundo dimensional.

Sin embarbo, al igual que siempre había alguien más fuerte, ¿había un fin para la belleza?

Si tuviera que expresar belleza en términos de poder de combate, Thanatos y los demás serían un caos mientras que Cardia tendría el poder de un gobernante Hwanmong. Sin embargo, Kang-jun pronto se dio cuenta de que su belleza era muy peligrosa. Su belleza estaba más allá de los otros grandes dioses demoníacos porque el poder destructivo inherente en ella superaba la imaginación.

Eso es correcto.

La mayoría de los seres no serían capaces de soportar el aura destructiva que ella emitía y serían destruidos. Dioses con la inmortalidad no desaparecerían, pero serían dañados durante bastante tiempo.

¿Deberían estar al menos en el rango de un gran dios demoníaco para soportarlo?

Eso no fue suficiente.

Spiros, Shilenda y Daric estaban literalmente petrificados en el acto.

!Una maldición extrema que convirtió incluso a los grandes demonios demoníacos en piedra!

“¡Um!''

Thanatos, que había estado resistiendo, estaba petrificado con un último gemido.

Era un tipo de sello.

Estarían encerrados en piedra para siempre a menos que Cardia lanzara la maldición.

Si murieron entonces podrían resucitar. Sin embargo, no fueron asesinados, sino petrificados en piedra para siempre.

"Una maldición muy aterradora."

Kang-jun no estaba paralizado, pero estaba tenso. De hecho, la belleza de Cardia no era el único problema.

¡El poder destructivo de la belleza!

Era sólo la punta del iceberg de sus verdaderas habilidades.

¡Un aura de un poder sin precedentes fue emitida por ella!

Era algo más allá del poder de la destrucción.

¿A qué nivel ha llegado?

En ese momento, Cardia observó a Kang-jun y se lamentó.

“¿Podría esa profecía verdaderamente realidad? De repente has aparecido ante mí.''

''¿Qué significa eso?''

"El día que el Abismo se abrió, hubo una profecía de que una persona con el poder de Hwanmong aparecería y me detendría. Tú eres del que hablaba la profecía.''

Alguien con el poder de Hwanmong.

¿Había una profecía sobre él?

Kang-jun se rió.

"Es la primera vez que oigo hablar de esto. Sin embargo, tengo el poder de Hwanmong. Así que esa profecía probablemente se hará realidad.''

Entonces Cardia rió fríamente.

“No, estás equivocado. Aunque es como la profecía, y has aparecido ante mí, pero no puedes detenerme con tu poder actual.'' En ese momento, el cuerpo de Kang-jun tembló y sus pies empezaron a ponerse más duros.

¡Jjejejeok!

“¡E-esto!”

Era esa maldición de petrificación otra vez. Una parte de él se estaba convirtiendo en piedra.

Era incomparablemente fuerte en comparación con antes.

“¡Eh! No puedo detenerlo.”

Una maldición derivada del poder trascendente de la destrucción que no podía ser detenido por él.

Cardia se burló de Kang-jun.

''Resistir es inútil. He superado el poder de la destrucción hace mucho tiempo a través de la meditación. Justo a tiempo, apareció ante mí.''

Kang-jun la miró fijamente.

"¡Más allá del poder de la destrucción! Entonces debes ser llamada un dios demoníaco superior, no un gran dios demoníaco.''

“¿Un dios demoníaco superior? Heh, no me disgusta el sonido de eso. Pero es un poco inútil.''

Cardia sonrió y continuó.

"No tengo interés en cosas como la destrucción. Es trivial ahora.''

''Entonces, ¿qué quieres?''

Cardia respondió como había estado esperando que Kang-jun preguntara.

''Sostendré el sistema dimensional entero en mis manos. Un ser absoluto en el sistema dimensional. Eso es lo que quiero.''

“¡Kaebul!”

Kang-jun quería decirle que no hablara tonterías, pero no podía decir nada.

“¿¿¡¡......!!??''

Mientras tanto, la petrificación había avanzado hasta su boca. Afortunadamente, su espíritu seguía intacto.

Como tal, todavía podía oír la voz de Cardia.

''Ahora este Abismo ya no me puede mantener atado. Después de un tiempo, subiré al Mundo Celestial y los mataré a todos. Los dioses celestiales son los que borran el orden del sistema dimensional. Una vez que desaparezcan, las dimensiones se harán pacíficas.''

Era ridículo.

Aunque Kang-jun estaba furioso por los dioses celestiales, había confirmado que eran existencias necesarias después de llegar al Abismo.

Los grandes dioses demoníacos en este Abismo.

No podía imaginar cuánto daño habrían hecho si permanecieran en el sistema dimensional.

En otras palabras, él quería alabarlos por lanzar a los grandes dioses demoníacos al Abismo. Sin embargo, estaba enojado por ser tratado igual que los grandes dioses demoníacos.

Además, ¿qué hicieron mal los miembros de su familia que fueron arrojados al infierno?

Así, Kang-jun todavía estaba pensando en cómo manejar al Mundo Celestial.

Por supuesto, él todavía ocuparía el mundo celestial.

No dejaría que se salieran con la suya.

Kang-jun pagaría todo lo que habían hecho.

Sin embargo, eso no significaba que se deshiciera del Mundo Celestial.

Al principio, estaba lo suficientemente enfadado como para deshacerse del Mundo Celestial, pero ahora se daba cuenta de la necesidad de su existencia. Kang-jun no quería estar a cargo de una cosa tan molesta.

Ahora el dios demoníaco superior dijo que ella quería destruir el mundo celestial.

Si Kang-jun no la detenía aquí, esas palabras pronto se convertirían en realidad.

Ella dijo que no estaba interesada en cosas como la destrucción, pero sus palabras mostraban signos de verdadera destrucción.

Cardia se acercó y dijo.

"Antes de eso, tengo la intención de sellarte completamente. Algo todavía parece extraño. La mitad de la profecía se hizo realidad, por lo que sería muy desconcertante si la otra mitad llegara a pasar también."

Entonces, ¿qué iba a hacer? ¿Quería matarle?

Eso era imposible. Kang-jun ya era un ser inmortal.

Por lo tanto, Cardia podía usar todo tipo de maldiciones en Kang-jun pero no podía matarlo.

Pero ahora no era el momento de sentirse aliviado de que no pudiera morir.

Cardia era consciente de este hecho más que nadie.

Mientras tanto, su rostro que se acercaba a Kang-jun era realmente hermoso.

Todavía podía ver a pesar de que sus ojos habían cambiado a piedra.

No fue sólo la vista.

Su sentido del olfato y el oído estaban todos todavía vivos. La voz de Cardia sonaba como si viniera de un sueño.

La misteriosa fragancia que salía de su cuerpo era suficiente para hacer sangrar la nariz.

''Heh.''

Cardia se rió de Kang-jun.

Su sonrisa era tan fantástica que incluso hizo que el maldito corazón de piedra de Kang-jun fuese golpeado violentamente. La sonrisa tranquila en sus labios rojos también era extremadamente sexy.

Sin embargo, las palabras que salían de esa boca no eran hermosas en absoluto.

"Es conveniente dejarte aquí así y molesto moverte a otra parte. Así que he llegado a una buena idea.''

Sus dos ojos brillaban intensamente.

'' Te romperé en varias piezas. Y pondré otra maldición sobre cada una de ellas. Incluso llevaré una pieza. ¿Qué tal? ¿No es una buena idea?''

Como era de esperar de un dios demoníaco superior, diciendo palabras tan terribles con una expresión brillante.

Suuk. Suuk.

Ya estaba poniendo sus propias palabras en práctica. Ella agitó sus manos y comenzó a separar el cuerpo de Kang-jun en pedazos.

Duk. Duk. Duuk.

Su cabeza fue cortada y sus miembros se separaron en varios pedazos.

“¿Qué debo tomar? De hecho, la cabeza es la mejor.''

Cardia tomó la cabeza de Kang-jun con ambas manos y se limpió la tierra. Entonces la cabeza de Kang-jun se comprimió al tamaño de un pequeño colgante. Ella sacó una cuerda de oro y la insertó en las orejas de Kang-jun. Así, el collar estaba completo. Ella lo colgó en su cuello y dijo.

"No se entristezca demasiado. No se puede ayudar ya que he estado atascada con las palabras de la profecía durante tanto tiempo. Si estuviera en mi posición, entonces también entendería por qué estoy haciendo esto."

Ella convocó un espejo y miró el collar con satisfacción. Ella palmeó la cabeza pendiente de Kang-jun y sonrió.

"¿Cómo es? La sensación de colgar alrededor del cuello del Soberano del sistema dimensional.''

Por supuesto, se sentía sucio. No que fuese incapaz de responder.

Kang-jun sabía que era un mundo extraño, pero nunca esperaba ser convertido en el colgante de un collar. Por no hablar de que era también sólo su cabeza.

"¡No! Está muy loca.”

Comparado con Cardia, pensó que los grandes dioses demoníacos Thanatos y Shilenda eran muy normales.

Y fuera de este mundo, Karosio que era conocido como la Diosa de la Destrucción podría ser llamado un ángel. Especialmente cuando se compara con Cardia. Hablando de ello, cuanto más tiempo pasaba en este mundo, más loco parecía. ¿Su extrema belleza llevó a la locura extrema?

De todos modos, ahora era el momento de despertarse. No podía quedarse aquí viendo.

"Un dios demoníaco superior no es más que un malvado dios demoníaco. Sin embargo, usted será el que rompa mi último límite, Cardia.”

La cadena del collar que sostenía el colgante se rompió repentinamente y la cabeza de Kang-jun voló hacia arriba.

Sususu.

La cabeza comprimida se volvió a su tamaño original.

¡Chak! ¡Chachak! ¡Chaak!

Ese no fue el final. Su cuerpo mutilado se reunió y se fusionó como un robot de transformadores.

Todavía estaba petrificado. Sin embargo, el cuerpo rígido inmediatamente comenzó a moverse.

¿Qué estaba pasando?

La maldición creada por el poder trascendente de la destrucción fue liberada.

Seguramente Cardia no había cambiado de idea y había liberado la maldición de Kang-jun.

Por supuesto que no.

Fue Kang-jun quien se liberó.